Las uvas se colocan en la prensa y luego en la estrujadora para extraer el mosto. En la bodega, el resultado de estrujado y prensado se guarda en barricas de acero inoxidable. Posteriormente se añade levadura para que la azúcar del mosto se convierta en alcohol. A este proceso se le llama fermentación.
¿Cómo se fermenta el vino tinto?
¿Cómo se fermenta el vino? – En primer lugar, y tras tener las uvas y/o el mosto encubado, se produce una primera fermentación que es común a todos los caldos. En esta fermentación, los azúcares de la uva se comienzan a transformar en etanol en un ambiente con presencia de oxígeno y de temperatura controlada.
- A esta fermentación se la conoce como “fermentación alcohólica”.
- Existe la posibilidad de una segunda fermentación que, al contrario de la primera, se acomete separando la materia sólida de la líquida.
- Esta segunda fermentación es más habitual en los procesos de elaboración de vinos tintos y es la que ayuda a suavizar y dar complejidad a los sabores y aromas puramente fermentativos.
En dicha fermentación se produce la transformación de un ácido de sabor fuerte (ácido málico) en otro más suave (ácido láctico). A esta fermentación se la conoce como “fermentación maloláctica”. En el caso de vinos blancos y rosados del año, esta fermentación no interesa que se produzca pues estaríamos eliminando acidez y frescura a los vinos.
¿Cómo se convierte la uva en alcohol?
¿Cómo se transforma la uva en vino? La fermentación del mosto, jugo o zumo de uva es el proceso por el cual los azúcares que contiene la propia fruta se transforman en alcohol por la acción de las levaduras. Durante dicha fermentación, se producen más de treinta reacciones químicas y se liberan un gran número de sustancias que pueden influir en la calidad final de un vino.
Una de ellas, el dióxido de carbono, hace que el vino parezca hervir durante la fermentación. En cuanto a los microorganismos existentes en la piel de la uva, no todos son igual de útiles en la elaboración del vino y existen algunos que pueden estropearlo, por lo que es necesario impedir que se desarrollen.
Para ello, hay que tener en cuenta las distintas variables que afectan a la propia fermentación: La acidez. Una acidez elevada impediría el desarrollo de las levaduras y ayudaría al florecimiento de bacterias indeseables. Las sustancias nutritivas. Para cumplir el proceso de fermentación, las levaduras necesitan, además del azúcar, otras sustancias existentes en el mosto, como vitaminas, minerales y nitrógeno. El oxígeno. La presencia de oxígeno favorece el crecimiento de las levaduras. Otros factores. Los pesticidas o unas altas radiaciones ultravioletas en los cultivos pueden alterar la funcionalidad de las levaduras. A lo largo del proceso de fermentación, el contenido de azúcar existente en el vino ha ido disminuyendo, al tiempo que ha aumentado el contenido de alcohol.
Las levaduras van muriendo progresivamente al faltarles el alimento y la fermentación se detiene. Es así como se consigue un vino seco, sin azúcar. El propio alcohol que se genera durante la fermentación juega un papel muy activo. Por un lado, favorece la precipitación tartárica, unos compuestos derivados del ácido tartárico presentes en las uvas y que conviene eliminar para suavizar el vino.
¿Cómo se hace el vino?
Por otra paite, la alta concentración de alcohol impide el desarrollo de las propias levaduras y, lo que es más importante, el desarrollo de microorganismos que pudieran alterar las cualidades del vino. Aporta, además, aroma y buqué a los caldos y transmite fuerza, calor y suavidad. En general, los mohos no son grandes amigos de los cultivos, y con las viñas ocurre lo mismo. Dos de los enemigos más peligrosos son el oidio o el mildiu, que pueden llegar a provocar pérdidas millonarias. Sin embargo, no todos son malos, de hecho el hongo denominado Botrytis cinérea produce unos vinos “botritizados”, originarios de la región húngara de Tokay, que han conseguido fama mundial y que, actualmente, se producen también en otras zonas, como la región de Sauternes en Francia, o los Beerenauslese alemanes.
Los mejores se elaboran con uvas recogidas grano a grano, para asegurar así una alta calidad. Una vez que las uvas adquieren una coloración dorada, dicho hongo contamina el racimo maduro, y provoca la deshidratación paulatina de la uva, lo que genera una concentración de azúcares, ácidos y aromas, entre otros elementos.
LA FERMENTACIÓN MALOLÁCTICA Tras la fermentación alcohólica se produce una segunda fermentación, conocida como fermentación maloláctica o secundaria. Su finalidad es transformar el ácido málico originario de las uvas en ácido láctico, menos agresivo que el anterior, mediante la acción de bacterias, lo que permite que el vino se suavice.
- Esta segunda fermentación se considera un paso importante en los vinos tintos, pero no en los blancos, que perderían aroma y frescura.
- Este tipo de fermentación produce una de serie de efectos en el vino, como un ligero aumento de la acidez volátil, la disminución de la acidez total y cierta pérdida del color.
Suele producirse de forma espontánea, aproximadamente una semana después de la fermentación alcohólica y prolongándose una semana más. Un artículo de : ¿Cómo se transforma la uva en vino?
¿Cómo hacer vino casero con levadura?
FERMENTACIÓN ALCOHOLICA DE NUESTRO VINO ARTESANAL – Para activar la levadura se utiliza una olla con capacidad para diez litros, se agrega agua hasta la mitad, se agrega la misma cantidad de mosto y tres cucharadas de azúcar. Se mezcla todo bien y se deja en reposo tapado en un lugar cálido por 20 minutos.
Se sabrá que la levadura está activada por las burbujas que se forman en la superficie. Una vez activada la levadura se añade lentamente al mosto agitando con una paleta, la cantidad de levadura a agregar se basa en una proporción de 1 gramo de levadura por cada litro de mosto. Luego se cierra toda la preparación con una tapa hermética, y se le coloca una manguera con conexión a un vaso que contenga una solución al 10% de bisulfito de sodio, esto con la finalidad de evitar contaminación con otras bacterias que pudieran afectar el mosto.
La manguera debe estar conectada al barril o envase contentivo del mosto a través de un corcho perforado de forma tal que no entre aire.
¿Cómo se hace el vino quimicamente?
Fermentación alcohólica – Es el proceso de fermentación del mosto, que consiste en la transformación en alcohol de los azúcares que contiene la uva por medio de la acción de las levaduras que se encuentran diseminadas por el medio ambiente, El producto obtenido, en su mayoría, es alcohol etílico, aunque también se genera dióxido de carbono.
- Este gas provoca que el vino durante este proceso parezca que está hirviendo.
- Durante la fermentación se liberan sustancias como el glicerol, el ácido succínico, el ácido acético, alcoholes superiores, y muchas más sustancias que pueden influir en la calidad final de un vino.
- A lo largo de este proceso natural se llegan a producir más de una treintena de reacciones químicas.
No es de extrañar que el primero en explicarlo científicamente fuera Pasteur, En la fermentación hay que tener en cuenta las variables que afectan a la misma:
El oxígeno, La presencia de oxígeno favorece el crecimiento de las levaduras. No obstante, la fermentación se desarrolla mejor sin la presencia de éste. Para conseguir el punto perfecto de oxígeno en los vinos tintos se lleva a cabo el fundamental proceso de remontado, que consiste en empujar hacia arriba de las cubas el vino que está fermentando en la parte inferior mediante unas bombas. La acidez, Una elevada acidez puede provocar efectos perversos como impedir que las levaduras se desarrollen e impidan el nacimiento de bacterias indeseables. Las sustancias nutritivas, Las levaduras necesitan, además del azúcar, otro tipo de sustancias para llevar a cabo el proceso de fermentación, como son vitaminas, minerales y nitrógeno que suelen encontrarse en el mosto. Más factores, La presencia de pesticidas en las vides y unas radiaciones ultravioletas muy fuertes pueden alterar el “trabajo” de las levaduras.
A medida que el proceso de fermentación va avanzando se va reduciendo el contenido de azúcar en el vino y va aumentando la presencia de alcohol. De esta manera, las levaduras se van muriendo poco a poco por falta de alimento y el proceso se detiene, obteniéndose un vino seco, sin azúcar. Es muy importante la función que aporta el alcohol que se ha generado durante la fermentación ya que favorece la precipitación tartárica, proceso por el que se eliminan los derivados del ácido tartárico, que se encuentran en las uvas, para suavizar el vino.
¿Cuáles son los microorganismos del vino?
Las levaduras son hongos unicelulares presentes en las superficies de las uvas y son las responsables de transformar el jugo de uva en vino, metabolizando los azúcares en alcohol en un proceso llamado fermentación.